Diez tipos de conducta destructiva budistas

Si queremos desarrollar relaciones más saludables y satisfactorias con los demás, así como mejorar nuestro propio bienestar, tenemos que desarrollar nuestro sentido de la ética. Eso significa abstenerse de conductas dañinas y destructivas y, por el contrario, actuar de manera constructiva y útil. Nos comportamos de forma destructiva cuando actuamos bajo la influencia de emociones perturbadoras, tales como la ira y la codicia. Perdemos nuestra paz mental y nuestro autocontrol, y actuamos compulsivamente nuestros hábitos negativos. A menudo herimos a otros, pero con certeza terminamos haciéndonos daño a nosotros mismos. Actuar de manera destructiva es la causa de nuestra infelicidad a largo plazo. Por otro lado, si ejercitamos el autocontrol basados en discriminar correctamente entre lo que es perjudicial y lo que es útil, y actuamos con amor y compasión, al final tendremos una vida más feliz; seremos amigos confiables de nosotros mismos y de los demás.
1. Tomar la vida de los demás – golpear o tratar bruscamente a las personas; hacer caso omiso de ayudar a alguien que necesita apoyo para realizar una tarea física; caminar demasiado rápido cuando vamos con una persona enferma o de edad avanzada; causar cualquier tipo de daño físico, incluyendo contaminar el medio ambiente y fumar cerca de no fumadores, especialmente niños.
2. Tomar lo que no nos han dado – descargar ilegalmente material de internet, plagiar, engañar, evadir impuestos, invadir la privacidad de los demás, e incluso tomar un bocado del plato de nuestra pareja o amigo sin preguntarle.
3. Involucrarnos en conducta sexual inapropiada – acosar sexualmente a alguien, hacer caso omiso de las necesidades de nuestra pareja al hacer el amor, mostrar muy poco o demasiado afecto.
4. Mentir: engañar a alguien acerca de nuestros verdaderos sentimientos o intenciones en una relación.
5. Usar lenguaje divisorio – criticar alguna acción positiva o éticamente neutra en la que alguien está involucrado o que está planeando hacer, y desalentarlo para que no la haga.
6. Usar lenguaje ofensivo –gritarles a las personas; hablar en un tono agresivo; hablarle a alguien de forma insensible y crítica cuando se encuentra emocionalmente vulnerable; usar lenguaje obsceno o sarcástico en momentos y con personas inapropiadas.
7. Hablar o parlotear sin sentido – traicionar la confianza de otros y revelar sus secretos íntimos; enviar mensajes de texto acerca de cosas triviales, sobre todo a mitad de la noche; publicar en las redes sociales fotografías o comentarios sobre aspectos triviales de nuestra vida diaria; interrumpir a otros sin dejar que terminen lo que están diciendo, y hacer comentarios tontos o decir cosas estúpidas durante conversaciones serias.
8. Pensar codiciosamente – sentir lástima por nosotros mismos al ver fotografías o leer los mensajes en las redes sociales acerca de los emocionantes y maravillosos momentos que otros han tenido, y celosamente pensar lo mucho que nos gustaría ser tan populares y felices. Desear que la persona con la que estamos comiendo en un restaurante nos comparta un bocado o un sorbo de lo que ha pedido.
9. Pensar con malicia – pensar obsesivamente en lo que podríamos haberle dicho a una persona para herirla, después de que nos dijo algo desagradable y cruel que no supimos cómo responder.
10. Pensar en forma distorsionada con antagonismo – tener pensamientos negativos y hostiles acerca de alguien que se ofrece a ayudarnos con algo que sentimos que podemos manejar. Pensar en lo estúpido que es alguien por tratar de mejorar en un aspecto que no es dañino, pero que no consideramos importante o que no nos interesa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario